Hoy es el Día Europeo de los Derechos de los Pacientes y una inquietud se ha apoderado de mí, por lo que he necesitado reflejarla en palabras. En el crisol de la humanidad, donde la fragilidad se encuentra con la compasión, surge un imperativo moral: el derecho de cada individuo a recibir cuidados paliativos cuando enfrenta el peso del sufrimiento.
Este derecho ha sido imposible para muchos, relegando a algunos a una agonía innecesaria e inhumana y a tomar decisiones fatales por falta de recursos. Es tiempo de democratizar los cuidados paliativos: para que en un país avanzado como España ninguna persona que esté sufriendo se quede sin acceder a los recursos de los cuidados, para aliviar y acompañar dignamente a la persona y su familia en esa etapa de su vida. Puedes leer el artículo completo aquí.